La conducta en los enfermos con demencias es una de las mayores amenazas para mantener su calidad de vida, afectando también la convivencia con sus cuidadores y su entorno más cercano.
El bienestar emocional de todas las personas implicadas el cuidado se puede ver afectado, llegando a angustiar, especialmente a estos cuidadores y al propio enfermo ocasionando el ingreso en instituciones socio-sanitarias..
En este cuaderno se incorporan consejos para aprender a elaborar estrategias que conjuntamente con la medicación (que recomiende el neurólogo) permitan al cuidador enfrentarse y controlar las conductas de los enfermos.
La conducta en los enfermos con demencia suele aparecer en estadios medios de la enfermedad, pudiendo ser leves al principio. La familia y cuidadores se verán enfrentados a problemas de convivencia serios. En algunos casos los enfermos manifiestan más de una conducta indeseada. Podemos encontrarnos con personas que se nieguen a asearse y no acepten ayuda de ninguna persona de la familia, ni siquiera de los hijos. En otros casos los trastornos se relacionan con la hora de dormir o con acciones violentas hacia el cuidador.
Para todo esto problemas existe medicación que suele mejorar el estado del enfermo; sin embargo, suelen surgir efectos secundarios.